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Cómo afectará la Ley contra el Desperdicio Alimentario al sector hostelero
Claves de la Ley contra el Desperdicio Alimentario
- Autodiagnóstico. La ley dicta que todos los agentes deben realizar un trabajo de autodiagnóstico de sus procesos productivos para identificar dónde se producen las pérdidas. Después, deben trazar un plan de prevención del desperdicio dónde fijen unas medidas para minimizarlo. Para ello, se establecerá una jerarquía de prioridades que establece el consumo humano como máxima prioridad.
- Donación o redistribución de alimentos. En esta segunda fase, los agentes de la cadena deben firmar convenios de colaboración con empresas, entidades sociales y otras ONG con el fin de donar y redistribuir los alimentos. En dichos acuerdos, deben aparecer claramente explicadas las condiciones de recogida, transporte y almacenamiento de los productos. Además, las entidades colaboradoras deberán garantizar la trazabilidad de las donaciones.
- Transformación de los alimentos. En el segundo orden de prioridad, se establece la transformación de los alimentos en productos como como zumos o mermeladas, entre otros, siempre que mantengan sus condiciones óptimas de consumo. Cuando no sean aptos para el consumo humano, se destinarán a la alimentación animal, la fabricación de piensos, el uso como subproductos o la obtención de compost y biocombustibles.
Y, ¿cómo afectará la Ley contra el Desperdicio Alimentario al sector hostelero?
Según la OCU, el sector hostelero desperdicia el 7% de la comida que compra, lo que supone no sólo una importante pérdida económica, sino también un grave perjuicio medioambiental y social. Con esta nueva Ley, las empresas del sector de la hostelería o restauración deberán promover una serie de buenas prácticas para evitar y reducir las pérdidas y el desperdicio alimentario. Algunas de las buenas prácticas que se pueden aplicar en los restaurantes son:- Fomentar criterios de compra sostenible, como los alimentos de KM0, frescos y de temporada.
- Flexibilizar los menús ofreciendo diferentes tamaños de la ración o de las guarniciones de acuerdo con el apetito que tenga el cliente.
- Fomentar la donación de alimentos con fines solidarios.
- Promover la entrega de los desperdicios a las plantas de compostaje.
- Facilitar al cliente una alternativa ecológica para que pueda llevarse los alimentos que no ha consumido. Para ello, los bares y restaurantes deberán disponer de envases desechables, compostables o reciclables que casen con los estándares de sostenibilidad requeridos.
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